El viernes se realizó la audiencia pública con los vecinos para analizar el Estudio de Impacto Ambiental de las obras de remodelación de Calle 11. Hasta allá llegó Gustavo Carrizo, movilero de Sin plumas en la lengua, quien estuvo charlando con los vecinos que mostraron descontento por algunas irreguralidades que tiene el proyecto municipal, ya que la ley dice que cualquier obra pública se debe llamar a los vecinos a audiencia pública para que opinen y objeten si es necesario.
Mariela Peña, una de las vecinas de la zona, expresó: «El director de Vialidad, el ingeniero Magariño, mediante una resolución del 8 de agosto convoca a una audiencia pública para el viernes 12 como paso previo para emitir el dictamen de impacto ambiental. Ustedes se imaginan que el expediente consta de 3 cuerpos de 574 fojas, ni Einstein puede analizar ese expediente en el plazo que ellos nos han dado para hacerlo. Pensamos que la idea es que no tengamos medios para oponerlos o participar, lo han convocado porque la ley lo ha exigido. Y lo han hecho entre gallos y medianoche como hacen todo para que la gente no se entere».