Representantes de organizaciones que nuclean a agricultores familiares de San Juan presentaron el viernes 16 un pedido de audiencia ante el Ministerio de la Producción de la provincia. En diálogo con Radio La Lechuza, el presidente de la Asociación de Puesteros de 25 de Mayo, Jorge Abrego, informó que solicitan la aplicación plena de la Ley de desarrollo rural integral de la Agricultura Familiar.
La normativa cuya plena implementación piden los agricultores fue sancionada por la Cámara de Diputados de San Juan en el año 2014 y sólo se están aplicando algunos artículos, en tanto hay cuestiones de importancia que todavía no se ejecutan. Entre éstas, Abrego destacó la necesidad de que se conforme –tal como lo ordena la ley- el Consejo Asesor de la Agricultura Familiar, cuya función es asistir al Ministerio de la Producción y participar en la discusión de las distintas políticas públicas relacionadas con el sector. Ese Consejo debería conformarse con miembros representantes de cooperativas agropecuarias de la Agricultura Familiar, asociaciones campesinas, organizaciones que reúnan a agricultores familiares y comunidades de pueblos originarios.
La ley Ley de desarrollo rural integral de la Agricultura Familiar contempla también que el Ministerio de la Producción implemente un Registro de Tierras Rurales, a fin de promover el ordenamiento territorial y la regularización de dominio de las explotaciones de la Agricultura Familiar. Este es otro de los aspectos que aún no se concretan y que forman parte de los reclamos de los productores locales, según comentó Abrego, quien se refirió también a la necesidad de implementar el articulado de la ley en lo referido a la creación de líneas de crédito destinadas a estos productores, así como la gestión de subsidios u otras formas de respaldo directo, a fin de facilitarles la adquisición de medios de producción.
La Agricultura Familiar es un modelo productivo de gran importancia en el país y en la provincia. Según los censos agropecuarios representa a más del 60 por ciento de las familias que viven en el campo. En este tipo de explotación rural el grupo familiar se integra a la unidad productiva, que trabaja por el autoabastecimiento y destina el excedente a la comercialización, tanto en ferias como en distintos mercados. Son en su mayoría pequeños productores que se dedican principalmente a la agricultura, los cultivos regionales, fruticultura, cría de animales y alimentos elaborados artesanalmente.
La comercialización, la regulación de la propiedad de la tierra para quien la trabaja y el acceso a tecnologías y crédito son, entre otros, problemas históricos de este sector rural, que se han visto agravados en el último año. En San Juan estos productores afirman que en la ley sancionada en 2014 se encuentran algunas posibles soluciones y por eso las organizaciones que los agrupan esperan para los próximos días una respuesta a su pedido de audiencia con el ministro Andrés Díaz Cano.
