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Los trabajadores despedidos del grupo Clarín volvieron a reclamar que la CGT convoque a un paro general. Mientras tanto, la central analiza posibles medidas de fuerza, según expresaron los principales dirigentes de la central obrera que se reunieron ayer en Mar del Plata. La definición de esas acciones podría darse en la reunión del consejo directivo que se realizará el 2 de febrero en Buenos Aires.
Desde la comisión de trabajadores afirman que se trata de un caso testigo, de una prueba piloto, del gobierno y de la empresa para intentar reducir derechos laborales en la principal imprenta del país para después hacer a nivel nacional.
El secretario general de la comisión interna, Pablo Viñas, dijo ayer en conferencia de prensa: “esta lucha es una lucha de todos”. Contó que se reunieron con el consejo directivo de la central, donde se les transmitió el mandato de asamblea de que consideran que debe llamar a un paro general y a un plan de lucha ante esta situación.
Los trabajadores también reclamaron el apoyo de los vecinos y vecinas de todo el país y llamaron a no comprar este domingo ni los diarios y ni las revistas del grupo.
Además, denunciaron ante la justicia federal que efectivos de la Policía Federal y la Policía Metropolitana realizan tareas de espionaje ilegal sobre los que mantienen la toma. La denuncia quedó en el juzgado del juez Ariel Lijo.
